Si hace un par de meses os animábamos a trepar por el nido del águila cual primate en su hábitat, hoy queremos presentaros otro proyecto de altura que cautiva.
¿Quién no ha soñado de pequeño con ser Tarzán y vivir en la copa de un árbol? Trepar por los arbustos para llegar a casa, pasar horas contemplando el paisaje y vivir en medio de la flora y fauna típica de ese lugar. De acuerdo, a lo mejor no querías ser el rey de la selva, pero te hubiera encantado tener una cabaña de madera en el jardín de tu casa, como aquellos niños de las películas que vivían trepidantes historias con sus amigos a más de cinco metros de altura.
Sea como fuere, la idea de pasar unos días en la copa de un árbol hipnotiza. Refugiarse en medio del bosque, sin ruidos molestos ni teléfonos móviles que incordien, es un auténtico placer.
Vivir en los árboles: una estancia rural de ensueño
Los amantes de la naturaleza fueron los pioneros en diseñar su pequeño oasis de desconexión en la cima de un árbol. Conocidas más popularmente como las treehouse, este tipo de alojamientos rurales se alzan en auténticos parajes naturales.
Sin embargo, las tendencias evolucionan y algunos deciden ir un paso más allá, trasladando a la urbe la magia de vivir en la copa de un árbol. En Berlín, el despacho de arquitectura Baumraum –especializado en el diseño y construcción de casas de árbol- cumplió el sueño familiar de Hans-Joachim y su nieto Kolja: implementar una vivienda en el árbol en un terreno rodeado de casas residenciales de estilo burgués.
A cuatro metros de altura, el Urban Treehouse emerge en medio de una parcela de 650 m2 de jardín. Ubicados a medio camino entre la urbe y el impresionante paraje natural de los lagos Krumme Lanke y Schlachtensee, los dos cubos de 21 metros cuadrados son un espacio singular con todo lujo de detalles: cocina equipada, dormitorio, sala de estar, cuarto de baño con agua procedente de la lluvia, televisión e internet. Refugio de inspiración para los huéspedes, cuenta con una terraza cubierta para los días de lluvia y otra exterior a 2,60 metros de altura.
Auténticas piezas de lujo de madera a las que para acceder no hace falta que uno esté en forma. Y es que, Baumraum apuesta en sus proyectos por la construcción de pasarelas de seguridad elaboradas con malla de cable de acero inoxidable X-TEND de Carl Stahl.
El Urban Treehouse es una muestra más de una corriente trend que apuesta por trabajar en la urbe y disfrutar de los servicios más sibaritas sin renunciar a la calidad de vida que ofrece el entorno natural. ¿Quién se anima a vivir colgado de un árbol?
Fotografías: Laura Fiorio y Baumraum